A pesar de que suelen ser más caros que los muebles convencionales, los muebles de obra pueden ser la mejor solución para cumplir con los dos objetivos previamente descritos: Dejar bonita la estancia y optimizar su funcionalidad.
Los muebles de obra son aquellas piezas de mobiliario que se construyen específicamente para ocupar un lugar muy concreto de la vivienda. Estos muebles pueden estar confeccionados con materiales como el pladur o la escayola y tienen una gama de posibilidades amplísima. Hay escayolistas especializados en el diseño y construcción de estos muebles.
Ventajas e inconvenientes de los muebles de obra
Decantarse por este tipo de muebles para vestir una parte de la casa tiene sus ventajas y sus inconvenientes. No obstante, el principal inconveniente que podemos encontrar para este tipo de muebles tiene que ver con el precio que estos suelen tener.
Al ser muebles fabricados a medida con materiales de obra como puede ser la piedra, el ladrillo, la escayola o el pladur, los costes pueden verse incrementados de manera significativa en comparación a los prefabricados.
Por si fuera poco, estos muebles tienen un carácter de exclusividad que, dependiendo de quién sea la persona o la empresa que lo fabrique, puede hacer que el precio final se incremente todavía más.
Por lo tanto, dependiendo de cuál sea el presupuesto disponible para invertir en el mobiliario de la casa, podremos hablar o no de inconvenientes reales para los muebles de obra.
Principales ventajas del mobiliario de obra
- Exclusividad de las piezas fabricadas. A pesar de que anteriormente hemos mencionado que este carácter de autenticidad del mueble puede encarecer el precio del mismo, la exclusividad constituye la principal ventaja de los muebles de obra. A pesar de que el desembolso inicial sea mayor, el valor total del inmueble puede verse muy incrementado con muebles de obra integrados en las estancias de la vivienda. Por si fuera poco, el aprovechamiento que se puede hacer del espacio será mucho más eficaz que con los muebles prefabricados. Normalmente, este mobiliario se fabrica en el propio espacio donde serán instalados para que la optimización del inmueble sea muy precisa.
- Personalización de los muebles. Directamente relacionado con el apartado anterior, nos encontramos con que el mueble que queramos utilizar en casa podrá personalizarse de la manera que más guste al usuario. Los muebles de obra pueden estar fabricados con los diseños, colores o estilos que más se ajusten a nuestros gustos o necesidades, haciendo que el inmueble sea mucho más especial.
- Calidad de los muebles. Por si fuera poco, los materiales utilizados para la fabricación de los muebles de obra garantizan, en última instancia, una resistencia y durabilidad mucho mayores que las que pueden tener los muebles prefabricados.
Tipos de muebles de obra
La manera más sencilla de agrupar los muebles de obra viene dada por el tipo de materiales que se hayan usado para su fabricación. A pesar de que existen otras clasificaciones que atienden, por ejemplo, al estilo o al uso del propio mueble, a fin de cuentas, el material suele ser lo más significativo de un mueble de obra.
Aunque normalmente los materiales de estos muebles suelen ser la piedra, el ladrillo o la madera, existen muchos fabricantes que están empezando a utilizar el pladur o la escayola para la confección.
Por más que de primeras pueda sonar que estos materiales no son tan nobles como los primeros, lo cierto es que tanto uno como otro ofrecen características que pueden ser muy interesantes, preservando la calidad a un precio mucho menor.
Diferencias entre el pladur y la escayola para muebles de obra
Aunque pueda pensarse que ambos materiales son prácticamente iguales, existen diferencias significativas entre ambos. Estas diferencias pueden ser claves para utilizar un material u otro dependiendo de qué mueble queramos fabricar:
El pladur está constituido por yeso y cartón en laminas. Su confección suele venir dada por una lámina de yeso entre dos láminas de cartón para conferir a la superficie de la construcción una flexibilidad y resistencia bastante fiable y económica.
Por su parte, la escayola se confecciona con una mezcla entre yeso y agua que resulta en una masa muy moldeable. Este material, aunque aporta también mucha flexibilidad, es menos resistente que el pladur.
Si por ejemplo necesitaremos fabricar una silla, el pladur podría ser una alternativa mucho mejor por la mayor resistencia que ofrece este material en comparación a la escayola. Sin embargo, si queremos un mueble para la televisión o un mueble más decorativo, posiblemente la escayola sea mejor para estos propósitos.
En cuanto al precio, el pladur suele ser más barato que la escayola. El motivo tiene que ver con la propia naturaleza de ambos materiales. Ya que el pladur tiene en proporción el doble de filas de cartón, esto hace que el precio se abarate en comparación a la escayola.
Hoy en día son muy comunes y muy demandadas las estanterías de pladur o los revestimientos de chimeneas hechas con escayola.