España, al igual que otros países de la unión europea, enfrenta en los últimos meses un problema de escasez de conductores y de choferes profesionales. Por múltiples motivos, el número de estos profesionales está disminuyendo significativamente y la renovación de trabajadores no se está llevando a cabo.
En el pasado Foro nacional del transporte realizado por la asociación empresarial AECOC, se acabó de mostrar la cifra total del déficit de transportistas del que hablamos: Y es que se necesitarían unos 20.000 empleados más en el sector para cubrir la demanda de puestos de trabajo existente en la actualidad. A nivel mundial, la cifra asciende a los 2,6 millones de transportistas.
Por si fuera poco, el 70% de estos conductores en nuestro país tienen 50 años o más. Con lo cual, es de esperar que el problema pueda continuar si no se logra de alguna manera atraer a trabajadores más jóvenes que renueven y den continuidad al trabajo de transportista.
Tipos de trabajo de los conductores profesionales
A pesar de que el trabajo de conductor se suele asociar a los camioneros y a los choferes, existe una gran variedad de puestos de trabajo dentro de todo el sector. La gran mayoría de ellos no están exentos de sufrir esta falta de trabajadores y de afrontar difíciles retos en un futuro no muy lejano.
Entre los principales trabajos de conductor podemos incluir además de los anteriormente citados a los conductores de autobuses (urbanos y de ruta), los maquinistas de trenes, los conductores de taxis, conductores de camiones de la basura o transportistas de personas con movilidad reducida.
Si bien es cierto que esta falta generalizada genera un importante impacto en el funcionamiento de ciertos servicios, el más importante de todos tiene que ver con los camioneros.
El hecho de que haya camiones parados por falta de conductores puede suponer un gran efecto negativo a nivel económico y de abastecimiento de ciertos productos. La pasada pandemia de Covid-19 puso de manifiesto la importancia vital de estos profesionales.
De hecho, el confinamiento supuso un punto de inflexión para la pérdida de conductores, ya que muchos se retiraron del trabajo. Por ello, en este artículo haremos un énfasis especial en este gremio de transportistas que resultan imprescindibles para el abastecimiento y para mantener el ritmo de consumo de las sociedades occidentales.
Principales causas del déficit de conductores de camiones
Para entender mejor el porqué de esta falta clara de conductores de camiones que quieran integrarse en el mundillo, hay que empezar preguntándose cómo es el trabajo que llevan a cabo.
¿Cómo trabajan los camioneros?
Para empezar hay que apuntar que el trabajo de camionero tiene una difícil conciliación familiar y laboral. Debido a los plazos de entrega que deben cumplir los empleados, muchas veces estos han de realizar largos viajes que pueden llevarlos fuera del propio territorio nacional. Este hecho no varía en camioneros asalariados o en camioneros autónomos.
Estos viajes implican largas jornadas al volante, a pesar de que la regulación europea es clara en cuanto a los descansos de los conductores y las horas máximas al volante. Esta regulación dicta los siguientes puntos clave que pueden ayudar a entender como es el trabajo de camionero:
- Los camioneros no pueden exceder las 9 horas diarias de conducción, pudiendo realizar una hora extra llegando a las 10 dos veces a la semana.
- Como máximo, los camioneros pueden conducir 56 horas semanales, teniendo que compensarse a los trabajadores en la semana siguiente con una reducción de la jornada semanal.
- En cuanto a los descansos, los trabajadores deben tener como mínimo 11 horas entre jornadas pudiendo reducir estas horas a 9 durante 3 días a la semana.
Estos 3 puntos de manera independiente señalan cuáles son las condiciones de trabajo de algunos camioneros y las largas jornadas que deben realizar fuera de casa.
Por si fuera poco, son muchos los camioneros que se quejan de periodos de descarga eternos en los puntos de entrega de sus mercancías. Todo ello, hace que el trabajador pase periodos muy largos de tiempo fuera de su domicilio.
Además, el trabajo de conductor de camiones también implica una formación y una acreditación previa. Según el tipo de transportista, estos deben tener como mínimo una licencia de conducción C1, C1+E o C+E.
En algunos casos, las empresas que contratan trabajadores también exigen tener un cierto conocimiento de mecánica por los posibles incidentes que puedan ocurrir en la carretera. El coste medio para la obtención de estos permisos ronda los 3.000 sumados al tiempo en el que se realizan las pruebas y los exámenes para su obtención.
Salarios de los conductores
El salario medio bruto de los camioneros oscila los 30.000 euros anuales según los datos del CETM publicados el pasado mes de febrero por Elperiodico.com. Es decir, entre unos 1.400 o 1.600 euros netos mensuales.
Si tenemos en cuenta lo anteriormente expuesto, el salario no resulta un incentivo significativo para plantearse acceder a la profesión. Teniendo en cuenta que a día de hoy el SMI se encuentra en 1.000 euros mensuales en 14 pagas, la diferencia entre el salario mínimo y el que cobran los conductores no parece compensar demasiado las condiciones del propio trabajo.
A nivel económico, algunos transportistas asalariados prefieren realizar trabajos fuera de España por los incentivos que estos reciben. No obstante, este tipo de trayectos hacen todavía más complicada la conciliación y suponen esfuerzos mucho mayores.
Los precios de los carburantes y los avances tecnológicos
Por último, el precio cada vez más elevado de la gasolina y de los carburantes, sumado a los avances tecnológicos incipientes en el gremio, hacen que la situación sea cada vez más preocupante.
Cuando hablamos de avances tecnológicos nos referimos a los cada vez más comunes sistemas de conducción autónomos que no necesitan conductores. Aunque pueda parecer futurista, a día de hoy ya hay en circulación vehículos automatizados dirigidos sin intervención humana.
Se espera que en el año 2030 este tipo de camiones y de vehículos sean mucho más comunes y que por ello se pierda un número significativo de puestos de trabajo.
Todas estas causas explican en cierta medida por qué en España hay un problema para cubrir la demanda de camioneros y transportistas. El sector está intentando por todos los medios hacer más atractivo el empleo y de esta manera captar jóvenes que renueven y den oxígeno al gremio.
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